
Entrevista con Paz Palomo, vicepresidenta de la Asociación Entrelíneas
Una de las cosas más positivas que nos ha dejado la pandemia es el tiempo que hemos tenido para reflexionar sobre algunas de las cosas más bellas de la vida. Tiempo para leer, tiempo para escuchar música o revivir algunas de nuestras escenas favoritas del Séptimo Arte. Entre tanto caos, la cultura ha sido nuestro mejor bálsamo. Hoy en Cóctel Art Magazine queremos rendir tributo a una asociación cultural que ejemplifica la apuesta por esas pequeñas grandes cosas que hacen la vida más apetecible. La Asociación Entrelíneas, es la ventana abierta al futuro que mira al pasado sin remordimientos, con la sabiduría del que siempre quiere avanzar en la impagable compañía de los mejores versos, novelas y escenarios. Esta entrevista es un homenaje a todos los valientes, que como Paz Palomo, vicepresidenta y tesorera de la Asociación Entrelíneas, apuesta por la cultura por encima de todo.
¿Cuéntanos en qué consiste la iniciativa Entrelíneas?
Actualmente, Entrelíneas es una asociación que promueve la cultura para todas las edades y géneros. Queremos que dentro de nuestras rutinas y de los hábitos de toda nuestra localidad se fomente el placer de leer y escribir.
Formamos parte de la Junta del Distrito de Loranca en Fuenlabrada y a través de ellos llegamos a toda la población local mediante nuestra revista trimestral, talleres, actividades y concursos en fechas destacadas.
¿Cómo y cuándo nace esta asociación?
Si te dijera que Entrelíneas nació hace 20 años quizá sería exagerado, aunque creo que no me quedaría muy lejos. Te explico cómo los conocí, quizá la mejor manera de que tú también los conozcas con mi misma mirada. Para mí nacieron en este momento.
Mi memoria se remonta al 2008, año en el que por primera vez me asomé a la Feria del Libro que organizaba la Junta del Distrito de Loranca con el reclamo del intercambio de libros que allí se celebraba. Yo fui con mis libros para intercambiarlos por otros y donde conocí la revista del taller de literatura. Uno de sus integrantes en ese momento, me obsequió con una de las revistas y me invitó a unirme a ellos explicandome que Entrelíneas era un taller de literatura y de escritura creativa, que estaba pensado para que los vecinos de la localidad pudieran aprender a plasmar por escrito sus inquietudes y sueños. Se trataba de compartir con otros este placer de leer y escribir un pequeño o gran relato, un poema,… cultivando la capacidad de imaginar, crear y soñar plasmándolo en un papel. Como podrás imaginar, a mi, como persona que siempre me ha gustado leer y ya desde desde niña escribía pequeños versos, me cautivó la idea y decidí hacerle un hueco en mi vida.
Tras dos años, en el inicio del curso del 2010, allí estaba yo, esperando a que se iniciara mi primera clase del taller de escritura creativa a cargo de Alicia Piso, escritora y profesora. Y en diciembre del 2010 salió a la luz la 19ª edición de la revista del taller de literatura en la que yo ahora sí era partícipe. Te aseguro que yo soy de letras, pero tras contarte toda esta historia y teniendo en cuenta que era una revista trimestral, su nacimiento tuvo que ser 18 trimestres antes de esta fecha. Las cuentas salen.
Decirte que ya desde esa fecha, Entrelíneas siguió existiendo como taller de literatura con sus clases una vez a la semana, su revista trimestral y haciendo el intercambio de libros cada año en la época de la Feria del Libro hasta 2017, a partir de este año se eliminó el taller como tal. Hubo un parón de un año en el que todos los integrantes, sobre todo los más antiguos estábamos un poco perdidos. Habíamos perdido no solo el taller, si no un “algo” muy arraigado en nuestra costumbre diaria. Decidimos recuperar el espíritu anterior y un año después, tras convertirnos en asociación, veía la luz, en diciembre del 2019, una nueva revista literaria en la que llamamos “segunda etapa”. Y así hasta la fecha.

¿Cuáles son sus principales motivaciones?
Las principales motivaciones que tenemos los integrantes de la asociación Entrelíneas de Loranca no es tanto convertirnos en un referente cultural para todos los amantes de la literatura del distrito, sino más bien poder ser una ayuda ofreciendo un espacio de creación artística y de promoción de la literatura para que se pueda aprender a valorarlas y dar la posibilidad de que aquellos que quieran puedan participar de una forma activa en la construcción de una cultura colectiva.
A través de nuestra revista queremos regalar el placer de poder leer nuestros relatos, cuentos y poesías creados a través de diversas técnicas de creación literaria. Además de dar visibilidad y abrir un escaparate a diferentes libros y temáticas a través de las recomendaciones literarias.
Al igual que a través de los talleres y concursos de escritura que coordinamos para el Día del Libro y fechas destacadas como carnaval, navidad, halloween, Reyes, etc queremos implicar a niños y adultos a compartir cultura. Sobre todo a niños, porque vincular a los más pequeños con el mundo de los cuentos y la creación artística es uno de los mejores legados.
Con motivo del Día Mundial del Libro, habéis desarrollado muchas acciones culturales. Háblanos de ello.
Este año al igual que el anterior ha estado marcado por la pandemia y todas nuestras actividades se han desarrollado en el entorno on line. La verdad es que ha sido todo un éxito.
Las actividades se fueron desarrollando a lo largo de toda la semana. Uno de los días quisimos dar a conocer y descubrir la vida y obra de Francisco Brines qué fue Premio Cervantes 2020 y que a causa de la pandemia pasó tan desapercibido. Hicimos creaciones en vídeo con sus poemas recitándolos. Fue una actividad para dar a conocer y nos sirvió también para ahondar nosotros también. La disfrutamos muchísimo cada uno de nosotros. Decirte que todos los videos están abiertos al acceso de cualquiera que le apetezca verla en nuestro canal de YouTube.
Seguimos la iniciativa creadora al público de nuestra localidad con un maratón de vídeo poemas para que pudieran participar creando sus propios vídeos y recitando los poemas escogidos que más les gustaran.
Dimos a conocer una técnica ancestral japonesa de cuentacuentos que se llama Kamishibai con dos de ellos creados por Carmen Sagrado, una de nuestras veteranas.
Y para terminar promovimos un concurso de microrrelatos muy especial, ya que estaba basado en un “tweet”. A través del concurso #twitteratura, había que escribir un microrrelato de 280 caracteres como máximo. Tuvimos muchísima participación y gustó mucho la experiencia.
Por supuesto, pusimos el broche final con nuestra última revista, te invito a leerla.
¿En qué proyectos estáis trabajando actualmente? ¿Qué nos puedes adelantar?
Actualmente, ya estamos pensando en actividades para el próximo curso, en Septiembre. A partir de esa fecha empezaremos a preparar nuestra próxima revista con todos los textos que ya hemos empezado a escribir.
También seguimos con nuestro club de lectura. Actualmente, estamos leyendo claraboya de José Saramago libro del cual haremos una reseña también para la revista.
¿Cómo ves el mundo de la cultura hoy en día?
Desde mi visión personal, creo que es muy difícil tener una perspectiva lúcida sobre el mundo de la cultura a fecha de hoy. Pienso que no se está apoyando lo suficiente desde donde debe y puede hacerse. Considero que se juega al despiste haciendo pensar que se le apoya cuando en realidad en muchos casos se ponen trabas, «porque hay cosas mucho más importantes en las que pensar y de las que preocuparse».
Estamos en un momento incierto lleno de promesas, pero también lleno de peligros. Es un momento en el que nosotros desde abajo debemos luchar de manera colectiva para construir un mundo en el que la cultura no deje de estar presente en ningún momento. Y para eso cada uno de nosotros debe poner su granito de arena. Nosotros en Entrelíneas de Loranca intentamos contribuir un poquito poniendo el nuestro.
A nivel creativo, ¿qué ha supuesto la pandemia para vuestra asociación?
Todos sabemos que nos ha tocado vivir momentos muy difíciles en los que hemos perdido mucho de todo. Hemos alejado y cambiado radicalmente rutinas, dejado ir sueños y proyectos, llorado personas, anhelado besos, abrazos y sonrisas…, sin embargo, hemos sabido adaptarnos y al igual que en muchas facetas, nosotros en la asociación también nos hemos permitido mirar hacia delante con ojos optimistas. Nuestras miradas estaban llenas de imágenes que hemos convertido en letras y hemos transformado nuestras voces, con el filtro de la mascarilla, en palabras y textos que nos han permitido mantenernos unidos y no perder la ilusión y la esperanza.
¿Cuál consideras que es el mayor valor añadido de las asociaciones culturales más pequeñas, como por ejemplo, las locales o vecinales?
Las asociaciones más pequeñas como Entrelíneas de Loranca, tienen la ventaja de que son más cercanas, cualquiera puede acceder a ellas sin necesidad de largos viajes. Pero no solo son cercanas por la cercanía física, sino también porque los vecinos tienen acceso a todas esas actividades con las que sentirse identificados y que reflejan la forma de vivir y de pensar de su localidad y de ellos mismos. Además, son lugares en donde puedes compartir y participar más fácilmente construyendo cultura con gente afín a ti de manera relajada porque la burocracia no es un obstáculo.
También pueden resultar una ventana al mundo dando visibilidad a voces pequeñas que tienen mucho que decir fuera de las fronteras de las grandes capitales.
La tecnología forma parte de nuestro día a día. Y, por supuesto, del día a día de la cultura. ¿Qué ventajas y desventajas le ves a los ritmos vertiginosos a los que avanza nuestra sociedad?
Aunque la tecnología forma parte de nuestro día a día va tan rápido que a veces es muy difícil seguirla. En nuestra asociación puedes encontrar socios jóvenes, como socios veteranos a los que la tecnología aún les está costando. Siempre es positiva, pero hay momentos en los que son un freno y personas que aún deben cruzar esa frontera.
La gente joven, está acostumbrada a las tecnologías y estas son un aliciente más para ellas, ya que pueden acceder a la cultura mucho más fácilmente.
A la gente más mayor, de la que te hablaba antes, les está costando adaptarse, aunque es cierto que han ido aprendiendo a fuerza de ganas.
Te pongo un ejemplo: tenemos varias veteranas ya, entre ellas cito a Carmen Sagrado y a Gloria Poza, que llevan desde el principio en la Asociación. Les encanta escribir. Están llenas de sabiduría y la comparten con nosotros y compartir con todos los miembros lo que escriben y a su vez, nos encanta escucharlas. Ahora en la pandemia les ha costado mucho más poder hacernos llegar sus voces y letras, ya que antes lo hacían de viva voz en nuestras reuniones semanales. Hemos pasado del tú a tú en un aula, al tú a tú en una videollamada y aunque ha costado un poco, al final se ha conseguido, aunque siempre quedan lagunas. Por suerte nos apoyamos y los más jóvenes ayudan a los más veteranos.
A los más jóvenes, ¿qué consejos les dais desde la asociación?
Que no dejen de leer. Da igual que lean un cómic, libros, revistas, historietas o diarios. No hace falta que sea literatura propiamente dicha, ya que se trata de disfrutar, puede ser de cualquier serie de moda por ejemplo. Siempre habrá algún libro, alguna temática que a ellos les guste y les pueda interesar.
Es muy importante que desde el círculo que le rodea a nivel social y familiar, se les recomienden lecturas y que ellos elijan después, sin imponer, ya que no se trata de castigar sino de inculcar el disfrute con esa lectura, como si de un juego más se tratara.
Leer enriquece su cultura, mejora su lenguaje, desarrolla la capacidad de concentración y la memoria, estimula la imaginación, y un largo etcétera, pero para ellos esto sólo cobrará sentido cuándo sean conscientes en su edad adulta. Ahora debemos ser nosotros los que les demos ejemplo.
Por último, recomendaciones culturales para este verano…
- Un libro para leer
Aunque elegir uno solo es bastante difícil, voy a proponer uno de los últimos libros elegidos para nuestro club de lectura, «Los Asquerosos» de Santiago Lorenzo. Es un libro que puede gustar o no pero del que cada uno sacará sus propias conclusiones, existenciales incluso, inclinándose hacia dos lados opuestos de la balanza, ya que se trata de una historia que se hace eco de la España vacía a modo de Thriller y con un humor poco habitual, a través de los ojos de Manuel Arcilla, que nos redefine la austeridad como ese algo que según los ojos de la sociedad actual, le puede ver como un gran cuerdo o un gran loco.
- Una obra de teatro que ver
“Los asquerosos” de Jordi Galceran y Jaume Buixó. Basada en la novela de Santiago Lorenzo con un reparto de lujo cómo son los actores Miguel Rellán y Secun de la Rosa. Ha estado una temporada entera en el Teatro Español. Ambos hacen un papel fantástico
- Una película que disfrutar
Si tengo que decirte una no puedo. El cine español en general me gusta mucho. Sobre todo ese cine que te da algo más, qué trabaja la psicología del personaje y que su argumento y su historia te remueve un poco la conciencia o el corazón. Es decir, esas películas que te aportan y que no te dejan indiferente cuándo terminan. Las últimas que he visto se corresponden con los Goya de este año 2021. Quizá las que más me gustaron fueron “Akelarre” y “Adú” por tener un trasfondo duro y real como la vida misma.
- Una exposición que admirar
Hace mucho que no voy a ninguna, pero estoy deseando poder disfrutar de alguna de Una artista con varios premios internacionales llamada Houda Bakkali, para mi una genio.
- Un canción para soñar
Todas las del álbum “Un bosque de té verde” de Nacho Goberna lider de un grupo de la década de los 80 llamado “La dama se esconde”.
- Una revista que descubrir
La revista de nuestra asociación sin lugar a dudas.
Puedes descargar la revista y seguir todas las novedades de la Asociación Literaria Entrelíneas en Facebook. Haz click en la imagen.

- Un poeta por descubrir
Alicia Piso para mí fue un gran descubrimiento que debería ser descubierto también por muchas más personas
- Un poema por descubrir
un poema cortito, de mis favoritos, del poemario llamado “Grietario” de Alicia Piso:
“Hay cosas antiguas que se han comido otras cosas
y a todas las personas que pasaron
con su carga de muerte o vida.
Es así que al final solo quedan las cosas
antiguas y llenas de lo importante,
un gesto, una palabra
definitiva que se vació por sus grietas
y persevera siempre en los que saben
y los otros la intuyen o se estremecen con su contacto.
Seremos cosas antiguas que asumirán nuestra presencia.”